La importancia de la seguridad web. Manual básico
Este 2021, los ciberataques y por tanto, la seguridad web están en alza. Por meses, los ciberataques aumentaron un 14% en enero, seguidos de un 33% en febrero y un 50% en marzo. Una escalada que va a ir en aumento este año, tanto en números de ataques como en su intensidad. Los motivos pueden ser varios, pero según el investigador de Atlas VPN, William Sword, muchos de ellos se deben a que las empresas, organizaciones e instituciones gubernamentales han sido pilladas con la guardia baja o directamente desprevenidos.
Todos somos susceptibles a ser atacados o crackeados. A veces, Internet puede ser peligroso, como cualquier otro sitio en el mundo. Pero, al igual que en la vida, las posibilidades se reducen si no te metes por sitios desconocidos y si vas protegido y seguro. Con las páginas web pasa los mismo. Por lo que, dentro de lo posible, hay que tener una buena seguridad web.
¿Por qué es importante la seguridad web?
En el mundo, cada día existen miles de páginas web, servidores web y dispositivos móviles que son el blanco de los llamados piratas informáticos. Sitios web que dejan de estar disponibles, información modificada o dañada, filtraciones de direcciones de correo electrónico, tarjetas de crédito, contraseñas, y un sinfín de problemas que tendremos que afrontar si no protegemos correctamente nuestra web. Este el propósito principal de la seguridad web: prevenir ataques y proteger sitios web del acceso, uso, modificación, destrucción o interrupción no autorizados.
La falta de seguridad web puede flaquear por diferentes razones:
- Un agujero en la seguridad: esto puede ser un foco de problemas sin necesidad de que haya detrás un agente externo. Se trata más bien de un fallo interno provocado por el mal funcionamiento de algún software, la caída de un servidor o cualquier problema imprevisto que dañe la web. Lo bueno de este tipo de fallos es que se pueden prevenir teniendo un buen nivel de seguridad web.
- Virus: También puedes caer bajo los efectos de algún virus, que son archivos maliciosos que se instalan en tu ordenador o servidor provocando que todo vaya peor.
- Hackers: por supuesto, puedes ser atacado por hackers que busquen vulnerabilidades web en Internet.
Subestimar los aspectos de la seguridad web puede acarrear muchos problemas que desde un principio se pueden evitar. Muchas empresas suelen dejarlo para lo último, cuando casi no queda presupuesto. De hecho, la seguridad informática es un factor que poca gente tiene en cuenta, dejando al descubierto información importante de la empresa. Esto no solo afecta a los empleados y empresarios, sino que también a sus usuarios, y como consecuencia, a la imagen de marca.
Por estas razones siempre deberíamos tener en cuenta una buena seguridad web a la hora de desarrollar una página en Internet.
¿Cómo hacer un sitio web seguro?
Para evitar riesgos innecesarios y proteger tu sitio web, se pueden aplicar acciones de seguridad como:
- Instalar un certificado de seguridad: los certificados de seguridad son la medida básica y primordial para proteger la información y los datos en tránsito que una página web recolecta (emails, números de tarjetas bancarias, contraseñas). Son aquellos que van desde el navegador de los usuarios hacia tu servidor.
- Proteger tu página con un Firewall para Aplicaciones Web: un Firewall (cortafuegos) es un sistema (hardware o software) que actúa como portero de discoteca. Es una especie de guardián que deja (o no) pasar los datos que fluyen entre dos redes (sitio web-internet). De esta forma, se impide que ciertos sistemas no autorizados puedan conectarse a tu sitio web.
- Usar un escáner de seguridad de páginas web: como su nombre indica, sirve para escanear y revisar el sitio web cada cierto tiempo con el fin de detectar malware o actividades sospechosas. También nos informa de si la página web está en listas negras de motores de búsqueda (blacklists).
- Actualizar el software frecuentemente: imprescindible para modernizar el software e implementar mejoras de seguridad.
- Poner contraseñas fuertes: numerosos accesos a páginas webs o servidores tienen contraseñas débiles, teniendo así mayor exposición a ser hackeadas. Para una buena contraseña, esta debe tener más de 8 caracteres, combinar letras, números y símbolos, o no utilizar términos demasiado claros (contraseña123). Los mejor es que sean aleatorias pero fácil de recordar, ya que los programas que descifran contraseñas están diseñados para encontrar palabras de diccionarios o de Internet.
- Limitar el acceso de usuario y permisos en el sitio web: lo ideal es otorgar a las personas los permisos justos y necesarios para poder trabajar en la web y realizar sus actividades. Estas deben ser por tiempo limitado y con el mínimo de derechos necesarios.
- Cambiar ajustes preestablecidos del CMS (según sea WordPress, Drupal, Joomla…): los CMS o sistemas de gestión de contenido son muy intuitivos a la hora de utilizarlos, pero en ocasiones pueden ser vulnerables si mantienes la configuración preestablecida de tu cuenta. Como hemos visto, los bots suelen atacar a los sitios desactualizados o fáciles de descifrar.
- Realizar copias de seguridad de la página web con frecuencia: una copia de seguridad ayuda a recuperar lo que existía antes del hackeo y poder recuperar información.
Ya has visto que la protección de datos y sitios web nos ayuda a prevenir problemas y fallos que podrían perjudicar seriamente a nuestro negocio. La importancia de la seguridad web y sus acciones ayudan a tener una página segura, evitando en la medida de lo posible que nuestro factor humano y confianza sean un hueco por el que entren problemas y hackers no deseados.